Siempre me ha parecido muy
interesante el tema de las distintas generaciones, sus diferencias y cómo las
temporalidades en que han vivido las mismas han ido moldeando su personalidad,
motivación, estilos de vida… Conocerlas
implica una mayor comprensión de las mismas y por lo tanto una convivencia más
sana y útil hasta el punto de alcanzar ciertos objetivos juntos. Concretamente,
en el campo de la mercadotecnia, resulta muy conveniente tener estos
conocimientos pues así tendremos un mayor acercamiento con el consumidor (Ricoveri M@rketing) .
Leyendo el artículo
“Las verdades de la generación X” me puse a pensar en lo que decía Ortega y
Gasset sobre la naturaleza del hombre y cómo le definían sus circunstancias en
la toma de decisiones, en su filosofía y psicología (Proyecto filosofía en español, 2003) . Al ser el consumo
una decisión (racional o irracional, no entraremos a este tema ahora) y
entendiendo un poco más sobre ciertos patrones de conducta que les definen,
podremos empezar a preguntarnos todo lo que podemos venderles, por ejemplo, a
los Baby Boomers. Incluso, utilizando
el pensamiento relacional, haciendo una matriz entre la generación a la que
pertenecen y en el momento de su vida en que se encuentran, podremos definir si
se les ofrece un seguro de vida o unas vacaciones y de qué tipo…
Incluso, en mi
labor docente me surge la pregunta de cómo podré “vender” mis servicios, “venderme”
como profesora o “vender” el conocimiento que imparto… Si se trata de la
generación Milenio con la que mayormente trato (también conformada por algunas
características descritas por Andrés Roemer para lo que denomina la generación
“Next”), ¿qué características puedo aprovechar en ellos para que la relación
sea funcional para ambas partes? Rápidos, multifuncionales, con cierta
inestabilidad pero muy dinámicos, son algunos factores que les definen y que
seguramente se deberían de tomar en cuenta a la hora de compartir el aula (Roemer, No. Un imperativo de la generación Next.,
2007) .
También habrá
que saber las diferencias que nos marcan. Existe un cambio no sólo de
preferencias sino de valores, que en algunos casos la diferencia es bastante
dramática. Esto lo pude constatar leyendo recientes noticas en las cuales se
habla de la “nueva moda” de consumir alcohol en jóvenes de ciertos países,
remotos, lejanos (segurito que aquí no sucede…). Esta moda consiste en la
introducción de un tampón vía genital el cual está empapado en alcohol, más
frecuentemente por lo que entiendo, Vodka. De esta manera, según aseguran los jóvenes
entrevistados, evitan que el hígado sufra daños y que los padres o autoridades les
descubran (Álvarez, 2013) . Estos sucesos han tenido el desenlace
de hospitalizaciones graves y me puedo imaginar que en sí la experiencia no ha
de ser muy agradable por lo que me pregunto qué valores y fines persiguen los jóvenes
que se someten a esto, ¿se trata de diversión o simplemente de intoxicación? Lo
mismo ocurrió con el descubrimiento de una compañera la cual encontró una página
que vende música la cual simula a nivel cerebral los efectos de ciertos
medicamentos y drogas (I-Doser) .
Al comentárselo a mi marido (obviamente
me interesa su opinión “generacional”) él me decía “cálmate vieja, seguro no se
han de generar los mismos efectos” y aunque de la manera más honesta (¡y a
estas alturas ya no sé si humilde!) no tenga yo idea pues no consumo drogas y
si probara dicha música no sabría la diferencia (o al menos eso imagino) me
pregunto ¿habrá realmente un mercado potencial para estos productos/servicios? ¿quiénes
y cómo son estos consumidores? ¿pertenecen a una sola generación o se trata de
una subcultura perteneciente a varias? Si
esto implica un peligro, ¿qué podemos hacer como individuos y sociedad? La
Secretaría de Salud por ejemplo, piensa reactivar un programa de la ONU para
combatir las adicciones (Altolaguirre, 2013) . La pregunta sería ¿está pensada esta
campaña, como producto, para los consumidores? No sólo se deberá realizar un
esfuerzo importante como regulador gubernamental sino como mercadólogos de
estos servicios, como padres de estas generaciones y futuras, como sus
educadores… The End.
Bibliografía
Altolaguirre, C. (26 de
junio de 2013). La Ssa implementará en México una campaña de la ONU contra
el consumo de drogas; cada año en el mundo mueren 200 mil personas por esta
adicción. Recuperado el 26 de junio de 2013, de Noticieros Televisa:
http://noticierostelevisa.esmas.com/nacional/613078/mexicanos-inician-consumo-drogas-18-anos/
Álvarez, C. (25 de
junio de 2013). Nueva moda para emborracharse… introducirse un tampón
empapado en vodka. Recuperado el 26 de junio de 2013, de Fernanda. La
periodista de vida:
http://fernanda-familiar.com/noticias/nueva-moda-para-emborracharse-introducirse-un-tampon-empapado-en-vodka/
I-Doser. (s.f.). I-Doser.
Recuperado el 26 de junio de 2013, de Binaurial brainwave simulated
experiences: http://www.i-doser.com/
Proyecto filosofía en
español. (2003). José Ortega y Gasset. Recuperado el 26 de junio de
2013, de Proyecto filosofía en español:
http://www.filosofia.org/ave/001/a185.htm
Ricoveri M@rketing.
(s.f.). Las verdades de la generación X. Recuperado el 26 de junio de
2013, de Ricoveri M@rketing:
http://ricoverimarketing.es.tripod.com/RicoveriMarketing/id8.html
Roemer, A. (2007). No.
Un imperativo de la generación Next. México: Aguilar.
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